Inédita imagen de unidad en Baiona para censurar la actuación de París (De Gara digital)
La fotografía de los asistentes a la comparecencia organizada por Bake Bidea ayer en Baiona era suficiente para comprobar el nivel de indignación e incomprensión que ha suscitado la entrega a Madrid y posterior encarcelamiento de la militante de Batasuna Aurore Martin.
Nunca antes se había producido una conjunción tan representativa de las fuerzas vivas de Ipar Euskal Herria a la hora de valorar un hecho, lo que demuestra el seísmo que ha generado en el panorama político y social de ese lado del Bidasoa.
Miembros y electos de todo el arco político, sindical y social visualizaron con su presencia y declaraciones el rechazo que les merece la actuación del Gobierno socialista. Desde el PS al PCF, pasando por la UMP, MoDem, EE-Berdeak, NPA, Batasuna, AB, EA, EAJ-PNB, todos convinieron en la «torpeza y falta de inteligencia» del Ejecutivo y lo hicieron, además, en nombre de sus respectivos partidos y con la más alta representación.
También asistieron miembros de organizaciones sindicales (CFDT, CGT, LAB, ELA, ELB, Solidaires) y sociales (Cimade, Anai Artea, LDH, Herrira...) y el decano del Colegio de Abogados, Gérard Fort. En total, unas 80 personas participaron en la inédita comparecencia.
Varios electos como el diputado centrista Jean Lassalle, la alcaldesa de Senpere, Christine Bessonart, y concejales así como el movimiento Lokarri y la plataforma de Naciones sin Estado, excusaron su presencia pero se adherieron a la denuncia.
Desde las primeras líneas contestualizaron el hecho en el marco del proceso abierto hace un año con la hoja de ruta de Aiete que, subrayaron, «generó gran esperanza y provocó avances importantes en la sociedad vasca». Recordaron que Martin es miembro de Bake Bidea, cuyo objetivo es «crear las condiciones para una paz justa y duradera», por lo que interpretaron su detención como «una provocación que puede perjudicar el proceso de paz».
Hicieron hincapié en que «lo único que se reprocha a Aurore Martin es su actividad política» y, tras «condenar con la mayor firmeza la decisión del ministro del Interior -según parece con la connivencia de las autoridades españolas-», recordaron que el propio Hollande mencionó en julio de 2011 el principio de «clemencia» cuando fue interpelado sobre el caso de la zuberotarra ahora presa.
Los dos portavoces apelaron al presidente de la República a «dar los pasos necesarios para que sea liberada de inmediato» y, asimismo, a que «de una vez por todas, se comprometa en el proceso de paz».
Finalizaron reiterando su firme intención de seguir trabajando «en favor de la paz y el diálogo» e invitaron a la sociedad civil a «unirse a ese camino y no caer en la provoación, ya que el objetivo que persiguen con estas actuaciones es obstaculizar la construcción de una paz duradera». En ese sentido, invitaron a los ciuadadanos y agentes políticos y sociales a participar en la concentración del próximo lunes, a las 13.30, ante la subprefectura de Baiona.
Después de la lectura del comunicado, varios electos y representantes políticos tomaron la palabra. El concejal bayonés Christian Millet-Barbé lo hizo en representación de Max Brisson ausente por otros compromisos y aclaró, además, que hablaba «en nombre de la UMP».
Reconoció que «nosotros mismos pusimos en marcha esa euroorden en 2011 por lo que no nos situamos en el plano de polemizar con el PS en ese aspecto». Añadió que no necesitan de esos medios para «combatir las ideas de Batasuna que no compartimos. Somos lo suficientemente mayores para llevar el debate político de forma totalmente democrática sin necesidad de artificios de este tipo».
Se declaró «extremamente consternado por la extradición de Aurore Martin» subrayando que «es la primera vez que Francia entrega a una ciudadana francesa por delitos de opinión que, además, no son delito en Francia».
En ese sentido, el miembro del PCF Daniel Romestant incidió más tarde en la inversomilidad de que se tratase de un vulgar control «ya que el propio ministro del Interior español se ha felicitado de la coordinación y colaboración» entre ambos estados. «A menos de que también sea él quien se encargue de organizar los controles de alcoholemía», ironizó.
Pero el grueso del mensaje de Lasserre que, como otros participantes en la comparecencia, estuvo en la Conferencia de Aiere, se centró en el proceso de paz: «Hace falta mucha más valentía para embarcarse en este proceso que para poner en marcha dispositivos brutales y físicamente impresionantes».
Su compañero de partido Michel Veunac, secretario del MoDem departamental, que junto al alcalde de Biarritz, Didier Borotra, mostró su apoyo cuando Martin reapareció públicamente en un acto celebrado en la ciudad labortana, tuvo asimismo duras palabras hacia el Gobierno: «Desde el punto de vista político el País vasco hoy no necesita demostraciones de fuerza sino de inteligencia política. Desgraciadamente, hay que decirlo, las posiciones en el caso de Martin como en el de la colectividad específica demuestran la carencia que tiene el gobierno en ese campo».
La consejera regional verde Alice Leiziagezahar manifestó su «decepción» y apeló a Hollande a «poner orden en su gobierno».
También otros intervinientes incidieron en la necesidad de impulsar el proceso de paz. Así lo hicieron Peio Etxeberri-Aintxart (AB), Xabi Larralde (Batasuna), Dani Camblong (PNB). Mattin Etxepare (EA) recordó que, «además de a Aurore, se sigue aplicando la euroorden a otros militantes de ciudadanía española».
Nunca antes se había producido una conjunción tan representativa de las fuerzas vivas de Ipar Euskal Herria a la hora de valorar un hecho, lo que demuestra el seísmo que ha generado en el panorama político y social de ese lado del Bidasoa.
Miembros y electos de todo el arco político, sindical y social visualizaron con su presencia y declaraciones el rechazo que les merece la actuación del Gobierno socialista. Desde el PS al PCF, pasando por la UMP, MoDem, EE-Berdeak, NPA, Batasuna, AB, EA, EAJ-PNB, todos convinieron en la «torpeza y falta de inteligencia» del Ejecutivo y lo hicieron, además, en nombre de sus respectivos partidos y con la más alta representación.
También asistieron miembros de organizaciones sindicales (CFDT, CGT, LAB, ELA, ELB, Solidaires) y sociales (Cimade, Anai Artea, LDH, Herrira...) y el decano del Colegio de Abogados, Gérard Fort. En total, unas 80 personas participaron en la inédita comparecencia.
Varios electos como el diputado centrista Jean Lassalle, la alcaldesa de Senpere, Christine Bessonart, y concejales así como el movimiento Lokarri y la plataforma de Naciones sin Estado, excusaron su presencia pero se adherieron a la denuncia.
Hecho muy grave
En un tono de cierta solemnidad que reflejaba la gravedad con la que han percibido la entrega de la militante abertzale, Peio Dufau (CGT) y Laurence Hardouin (Cimade) leyeron un comunicado en nombre de los asistentes.Desde las primeras líneas contestualizaron el hecho en el marco del proceso abierto hace un año con la hoja de ruta de Aiete que, subrayaron, «generó gran esperanza y provocó avances importantes en la sociedad vasca». Recordaron que Martin es miembro de Bake Bidea, cuyo objetivo es «crear las condiciones para una paz justa y duradera», por lo que interpretaron su detención como «una provocación que puede perjudicar el proceso de paz».
Hicieron hincapié en que «lo único que se reprocha a Aurore Martin es su actividad política» y, tras «condenar con la mayor firmeza la decisión del ministro del Interior -según parece con la connivencia de las autoridades españolas-», recordaron que el propio Hollande mencionó en julio de 2011 el principio de «clemencia» cuando fue interpelado sobre el caso de la zuberotarra ahora presa.
Los dos portavoces apelaron al presidente de la República a «dar los pasos necesarios para que sea liberada de inmediato» y, asimismo, a que «de una vez por todas, se comprometa en el proceso de paz».
Finalizaron reiterando su firme intención de seguir trabajando «en favor de la paz y el diálogo» e invitaron a la sociedad civil a «unirse a ese camino y no caer en la provoación, ya que el objetivo que persiguen con estas actuaciones es obstaculizar la construcción de una paz duradera». En ese sentido, invitaron a los ciuadadanos y agentes políticos y sociales a participar en la concentración del próximo lunes, a las 13.30, ante la subprefectura de Baiona.
Después de la lectura del comunicado, varios electos y representantes políticos tomaron la palabra. El concejal bayonés Christian Millet-Barbé lo hizo en representación de Max Brisson ausente por otros compromisos y aclaró, además, que hablaba «en nombre de la UMP».
Reconoció que «nosotros mismos pusimos en marcha esa euroorden en 2011 por lo que no nos situamos en el plano de polemizar con el PS en ese aspecto». Añadió que no necesitan de esos medios para «combatir las ideas de Batasuna que no compartimos. Somos lo suficientemente mayores para llevar el debate político de forma totalmente democrática sin necesidad de artificios de este tipo».
Se declaró «extremamente consternado por la extradición de Aurore Martin» subrayando que «es la primera vez que Francia entrega a una ciudadana francesa por delitos de opinión que, además, no son delito en Francia».
Más valentía para la paz
Jean-Jacques Lasserre intervino en calidad de presidente del Consejo de Electos y, tras decir «que no es posible ser insensible ante la decisión escandalosa del Gobierno», planteó la idoneidad de investigar si la detención ha sido organizada y buscada, extremo que considera importante intentar aclarar.En ese sentido, el miembro del PCF Daniel Romestant incidió más tarde en la inversomilidad de que se tratase de un vulgar control «ya que el propio ministro del Interior español se ha felicitado de la coordinación y colaboración» entre ambos estados. «A menos de que también sea él quien se encargue de organizar los controles de alcoholemía», ironizó.
Pero el grueso del mensaje de Lasserre que, como otros participantes en la comparecencia, estuvo en la Conferencia de Aiere, se centró en el proceso de paz: «Hace falta mucha más valentía para embarcarse en este proceso que para poner en marcha dispositivos brutales y físicamente impresionantes».
Su compañero de partido Michel Veunac, secretario del MoDem departamental, que junto al alcalde de Biarritz, Didier Borotra, mostró su apoyo cuando Martin reapareció públicamente en un acto celebrado en la ciudad labortana, tuvo asimismo duras palabras hacia el Gobierno: «Desde el punto de vista político el País vasco hoy no necesita demostraciones de fuerza sino de inteligencia política. Desgraciadamente, hay que decirlo, las posiciones en el caso de Martin como en el de la colectividad específica demuestran la carencia que tiene el gobierno en ese campo».
La consejera regional verde Alice Leiziagezahar manifestó su «decepción» y apeló a Hollande a «poner orden en su gobierno».
También otros intervinientes incidieron en la necesidad de impulsar el proceso de paz. Así lo hicieron Peio Etxeberri-Aintxart (AB), Xabi Larralde (Batasuna), Dani Camblong (PNB). Mattin Etxepare (EA) recordó que, «además de a Aurore, se sigue aplicando la euroorden a otros militantes de ciudadanía española».