El presidente boliviano, Evo Morales, decretó hoy la expropiación de las acciones de la española Iberdrola en dos distribuidoras de energía eléctrica en las regiones de La Paz y Oruro, una empresa de servicios y una gestora de inversiones. Militares y policías toman las instalaciones de las compañías nacionalizadas.
"Nos hemos visto obligados a tomar esta medida para que las tarifas de servicio eléctrico sean equitativas en el departamento de La Paz y Oruro y la calidad de servicio eléctrico sea uniforme en el área rural y urbana", afirmó Morales.Las firmas expropiadas son dos de las principales distribuidoras de electricidad en La Paz, Electropaz, y en Oruro, Elfeo, además de la empresa de servicios Edeser y la gestora de inversiones Compañía Administradora de Empresas.
El primer gesto visible ha sido la toma de la instalaciones por parte de efectivos de las Fuerzas Armadas y la Policía Boliviana. En concreto, 740 policías han sido movilizados para la toma de las sedes de las distribuidoras. El operativo contempla además la movilización de militares en las zonas rurales donde también existan instalaciones de estos dos proveedores. En las sedes de ambas eléctricas en La Paz se han desplegado pancartas con el lema "Nacionalizado", informa el diario boliviano 'La Razón'.
"El plan de operación contempla la movilización de 740 efectivos policiales, 540 en el departamento de La Paz y 200 en Oruro. Se ha hecho una coordinación con el Ministerio de Defensa según la cual en las áreas rurales las instalaciones deben ser resguardadas por el Ejército y en tanto que en las áreas urbanas por la Policía Boliviana", ha explicado el ministro de Gobierno, Carlos Romero.
En el caso de La Paz, dijo el ministro, el despliegue policial se realizó en las zonas centro y sur de la capital, así como en la ciudad de El Alto. "Son 28 instalaciones que se encuentran al cargo directo de la policía boliviana", ha indicado.
Además, ya ha tomado posesión como gerente general de Electropaz el ingeniero René Ustariz en una ceremonia que ha contado con la presencia del vicepresidente, Álvaro García Linera, ministros y viceministros.
"Va a haber una justa remuneración
García Linera ha justificado la nacionalización en base a preceptos constitucionales y ha anunciado una remuneración justa para Iberdrola. "Va haber una justa remuneración de lo que les corresponde no vamos a actuar de manera arbitraria (...) habrá un trato justo a los inversionistas. La Empresa Nacional de Electricidad (Ende) evaluará a través de un organismo independiente y entraremos en la negociación correspondiente para encontrar una salida negociada y no tengamos ningún problema", ha declarado García Linera, según recoge 'La Razón'.
El vicepresidente también ha dirigido un mensaje a los bolivianos: "Estamos en cumplimiento a la Constitución, de garantizar el servicio equitativo de los servicios básicos".
El propio decreto supremo que supone la nacionalización contempla que un organismo independiente contará con 180 días para realizar una tasación del valor de la participación de Iberdrola en las cuatro empresas nacionalizadas y determinar así la cantidad que deberá abonar el Estado a Iberdrola a través de Ende.
A través de su filial Iberbolivia, Iberdrola posee el 89,5% de las acciones de Electropaz y el 92,8% de Elfeo. La primera da servicio a más de 470.000 clientes, de los cuales aproximadamente el 89% del total son particulares, mientras que la segunda que cuenta con más de 80.000 clientes.
"Al igual que otros decretos de nacionalización, va a haber un tercero independiente que se va a hacer cargo de legalizar todo el estudio de valorización de la empresa", ha explicado la viceministra de Electricidad, Hortensia Jiménez, en declaraciones recogidas por la emisora Radio Fides. La propia Jiménez ha anunciado una reducción de hasta el 50 por ciento en las tarifas eléctricas en las zonas rurales cuyo servicio está cubierto por las compañías recién nacionalizadas
Expropiaciones sin compensación económica
El mandatario ya expropió en mayo pasado las acciones de Red Eléctrica Española (REE) en la Transportadora de Electricidad (TDE) sin que hasta el momento se haya llegado a un acuerdo de compensación económica.
Iberdrola, a través de su filial Iberbolivia, posee el 89,5 % de las acciones en la Empresa de Electricidad de La Paz (Electropaz) y el 92,8% en la Empresa de Luz y Fuerza de Oruro (Elfeo).
Según el decreto leído por Morales hoy en una comparecencia por sorpresa, la estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE) asumirá el control de las cuatro empresas nacionalizadas en representación del Estado boliviano. Al igual que en anteriores expropiaciones, se dispuso también que la compensación a Iberdrola provendrá de una tasación realizada por una "empresa independiente (...) en el plazo de 180 días hábiles".
"En resguardo del interés público, el gerente general de ENDE contará con el apoyo de la fuerza pública para garantizar la continuidad de la distribución eléctrica" en La Paz y Oruro, agrega el decreto.
Morales justificó que hay una brecha grande entre las tarifas urbanas y rurales en estos departamentos, por lo que se decidió la "nacionalización" de las distribuidoras eléctricas.
"Esta medida garantizará el derecho igualitario de los ciudadanos que viven en el área rural, precautelando su economía con tarifas equitativas y un servicio de calidad uniforme. Lamentablemente nos han dejado unas diferencias enormes entre el área urbana y rural", aseveró el mandatario. Citó el caso de La Paz, donde la tarifa eléctrica urbana en promedio es de 0,63 bolivianos (0,09 dólares) por kilovatios/hora, mientras que en el área rural es de 1,59 bolivianos (0,23 dólares).
Morales expropió en 2010 las acciones de cuatro empresas generadoras de electricidad, incluidas dos filiales de la francesa GDF Suez y la británica Rurelec, que inició un arbitraje a Bolivia en la Corte de La Haya por esa medida.
Además de las eléctricas, el mandatario ha nacionalizado una quincena de empresas de hidrocarburos, cementos y minas, entre otras, desde que llegó al poder en 2006.