viernes, 15 de junio de 2012

Iñigo Cabacas juicio

...de Deia digital....
Bilbao. Las continuas apelaciones del consejero de Interior, Rodolfo Ares, al proceso judicial en marcha sobre la muerte de Iñigo Cabacas pueden acabar jugándole una mala pasada. Y es que los primeros pasos de dicho proceso están echando por tierra buena parte de los argumentos que había defendido el Departamento sobre las circunstancias en las que el joven fue herido por una pelota de goma disparada por la Er-tzaintza el pasado 5 de abril. Falleció cuatro días después.
Según fuentes de la defensa de la familia Cabacas, que se ha personado como acusación particular, las declaraciones de los primeros testigos en el Juzgado de Instrucción número 10 de Bilbao "están dejando claro que la versión de la Er-tzaintza no se ajusta a la realidad de los hechos". El pasado martes se practicaron las primeras pruebas testificales con la comparecencia de varias personas, algunas de ellas amigos de Cabacas que "estaban a su lado en ese momento".
El relato de Interior sobre lo sucedido tras el partido disputado entre el Athletic y el Schalke 04 hacía referencia a una pelea y a la presencia de personas heridas, lo que provocó la actuación de la Policía vasca. También se involucraba a grupos ultras y personas encapuchadas. Sin embargo, los testigos aseguran que no vieron nada de esto. Más aún, siempre según la defensa, la Consejería que dirige Rodolfo Ares sitúa los mencionados incidentes en dos puntos concretos, a tenor de las llamadas de emergencia recibidas: a la altura de El huevo berria y de Compro oro, ambos establecimientos situados en Licenciado Poza, "a una manzana de distancia de donde falleció Cabacas, en María Díaz de Haro".
Muy al contrario, el testimonio aportado asegura que los agentes llegaron sin previo aviso y que, sin decir nada, empezaron a disparar desde el final de la acera hacia las personas que estaban en el callejón, pese a que había gente con los brazos levantados. Según esta versión, los disparos se produjeron además "en horizontal", lo que desmentiría que se realizaran contra el suelo para resultar menos lesivos. Los testigos agregan que hubo más heridos, uno de ellos tras sufrir un pelotazo en un omoplato.
La abogada de la familia, Jone Goirizelaia, afirmó a DEIA que "esto demuestra que la actuación fue desproporcionada, irracional, sin sentido y sin justificación". Este arranque de la fase de instrucción se prolongará hasta mediados de julio con comparecencias todas las semanas de gran número de testigos -la próxima semana hay habilitados dos días de declaraciones-.
Pese a que la acusación particular también ha solicitado la presencia de los ertzainas -estuvieron implicados cerca de 60, directa o indirectamente-, todavía no se han establecido las fechas para ello. Sin embargo, el periodo vacacional puede provocar que dichas comparecencias no se produzcan hasta septiembre. La jueza también debe decidir aún sobre las pruebas periciales reclamadas.